viernes, 29 de enero de 2010

SIGNOS ORTOGRAFICOS

SIGNOS ORTOGRAFICOS
COMA
11.1. La coma indica las pausas más o menos cortas dentro de una oración, permite en la lectura conocer el sentido de las frases y puede señalar entonación ascendente y descendente. Nunca se debe colocar una coma entre sujeto y verbo. Las reglas para su uso, que se recogen a continuación, están tomadas fundamentalmente de la gramática de la lengua española editada por la academia con algunas explicaciones adicionales.
11.2 Dos o más partes de una oración, cuando se escriban seguidas y sean de la misma clase, se separaran con una coma. Ejemplo; “Juan, Pedro y Antonio”. Pero no cuando medien estas tres conjunciones: y, ni, o. ejemplos: Juan, Pedro y Antonio”; “ni el joven ni el viejo”, “bueno, malo o mediano”. (a veces es necesaria la coma para separar oraciones unidas por una conjunción copulativa, de modo que se facilite la lectura: “Juan viajó la pasada noche a Barcelona y a Madrid no irá hasta mañana).
11.3 En una cláusula con varios miembros independientes entre sí, estos se separan con una coma, vayan precedidos o no de una conjunción. Ejemplos: “todos mataban, todos se compadecían, ninguno sabía detenerse”; “al apuntar el alba cantan las aves, y el campo se alegra, y el ambiente cobra movimiento y frescura”.
11.4 Las oraciones que suspendan momentáneamente el relato principal se encierran entre comas. Ejemplos: “la verdad, escribe un político, se ha de sustentar con razones y autoridades”; “los vientos del Sur, que en aquellas abrasadas regiones son muy frecuentes, ponen en grave peligro a los viajeros”.
11.5 El nombre en vocativo va seguido de una coma, si está al principio; precedido de una coma si está al final; y entre comas, si se encuentra en medio de la oración. Ejemplos: “Juan, óyeme”; “óyeme, Juan”; “repito, Juan, que oigas lo que te digo”.
11.6 Cuando se invierte el orden regular de las oraciones de la cláusula, adelantando lo que había de ir después, debe ponerse una coma al final de la parte que se anticipa. Ejemplo: “cuando el cuadrillero tal oyó, túvole por hombre fuerza de seso”; Sin embargo, coma no es necesaria en las transposiciones cortas y muy perceptibles. Ejemplo: “donde las dan las toman”].
[Respecto a esta regla general, se recuerda que en los textos noticiosos no se debe
11.7. La elipsis del verbo se indicará con una coma. Ejemplo: “usar de venganza con el superior es locura; con el igual, peligro; con el inferior, vileza”.
11.8 La coma se utiliza, además, para marcar las décimas o centésimas en una cantidad escrita con números. Ejemplos: 10.5, 10,50”
11.9 Hay tres tipos que se repiten que se repiten con harta frecuencia en el uso de la coma. Son estos:
-Antes del adverbio “como”, este signo ortográfico cambia el significado en muchas oraciones. No es igual “no lo hice como me dijiste”(lo hizo de distinta forma) que “no lo hice, como me dijiste” (no lo hizo, luego cumplió el encargo).
- Aplicada a ciegas, la norma de encerrar entre comas un nombre propio, cuando lo que le precede en la oración es el cargo o condición de la persona nombrada, lleva al error. No es lo mismo escribir “el capitán José Fernández ha sido condecorado” que, “el capitán, José Fernández, ha sido condecorado”. Tal como está redactado el segundo de los ejemplos, José Fernández es el único capitán que existe.
- Cuando se omite antes de una complemento circunstancial y altera la concordancia. Ejemplos: “el general pidió orden durante su toma de posesión” y “el general pidió orden, durante su toma de posesión. En el primer caso, solamente reclamaba orden para el acto en que tomaba posesión. En el segundo, pide orden en términos generales, y la petición se produce durante el citado acto.
11.10 Siempre que se pueda, es preferible eliminar la coma, sobre todo en frases cortas; “yo soy de Cuenca, y tu de Madrid; pero no “yo soy de Cuenca, y tu, de Madrid”.
11.11. Hay que evitar el error de convertir en una oración con verbo elidido aquellos títulos simplemente enunciativos que enmarcan un escrito; “El general en su laberinto” no puede ser “el general, en su laberinto”; “el fútbol antes de la guerra” no podría convertirse en “el fútbol, antes de la guerra”.
PUNTO
11.12 Se emplea punto (.) para indicar el final de una oración, para marcar los millares en las cantidades numéricas escritas con cifras, en las fracciones de hora (“14.30”, pero no “14,30”) y para las iniciales de nombres o apellidos ( J. Ortega y Gasset”, John F. Kennedy”).
11.13 No se debe emplear punto en las siglas –salvo cuando formen parte de un texto todo el escrito en mayúsculas, por ejemplo un cintillo-, en los números de años o en los teléfonos.
11.14 El punto va detrás del paréntesis, de la raya o de las comillas de cierre, también cuando cualquiera de estos signos se haya abierto inmediatamente después de un punto. Nunca se suprimirán el paréntesis, el corchete o las comillas de cierre por el hecho de coincidir con el punto final de una oración.
11.15 Después de los puntos suspensivos (que son tres y nada más que tres) no se pone punto final. Tampoco después de los signos de interrogación o de admiración.
11.16 En el caso de enumeraciones escritas en distintos párrafos, cada uno de éstos llevará punto final.
11.17. No se podrá punto final a los textos normalmente constituidos por una sola oración – que se componen en línea aparte y, por lo general, en otro tipo de letra. Por ejemplo, los titulares, las firmas y los ladillos no engatillados (los engatillados si, puesto que forman parte del párrafo que encabezan). Ahora bien, esta norma es de orden general; se aplicará a todos los textos de una misma especie, con independencia de que, en un caso concreto, no se cumplan algunos de los requisitos exigidos. Un pié de foto, aunque conste de una sola oración, llevará punto final.
PUNTO Y COMA
11.18. El signo de punto y coma (;) señala pausa y descenso en la entonación; no como el punto, que cierra una oración completa, sino como mero reposo entre dos o más miembros de ésta. Se trata del signo más subjetivo, que depende en gran medida de la voluntad del autor.
No obstante, debe emplearse punto y coma en los siguientes casos:
11.19. Para distinguir entre sí las partes de un período en las que hay ya alguna coma. Ejemplo: “los periodistas se desparraman por los suelos con estrépito de cámaras, crash, crash; los hombres de turbante y grandes mantos se desploman con sordo golpe amortiguado por las ropas, plof, plof; los seguidores resbalan en su aturullamiento por conseguir una buena posición para ver al imán, cataplún”.
11.20. Entre oraciones coordinadas adversativas. Ejemplo:“el camino no ofrecía grandes peligros; sin embargo, no me atreví”. Ahora bien, si se trata de oraciones cortas basta una simple como. Ejemplo: “lo hizo, aunque de mala gana”.
11.21. Cuando a una oración sigue otra precedida de conjunción, que no tiene perfecto enlace con la anterior. Ejemplo: “pero nada bastó para desalojar al enemigo, hasta que se abrevió el asalto por el camino que abrió la artillería; y se observó que uno solo, de tantos como fueron deshechos en este adoratorio, se rindió a la merced de los españoles”.
11.22. Cuando después de varios incisos separados por comas la frase final se refiera a ellos o los abarque y comprenda todos. Ejemplo: “el incesante tráfico de coches, la notable influencia de gentes, el ruido y griterío en las calles: todo hace creer que se da hoy la primera corrida de toros”.
11.23. En las relaciones de nombres cuando a estos les sigue el cargo u ocupación de la persona. Ejemplo: “Jack Bell, de the associated Press; Bassin, del News de Dallas, y Bob Clark, de la American Broadcasting Company, iban en el asiento posterior”. Obsérvese que en el último nombre la conjunción y que le precede elimina el punto y coma, sustituyéndolo por una coma. No obstante, en algunos casos queda a gusto del autor escribir también aquí un punto y coma, si con ello gana en claridad. Ejemplo: “a cinco columnas, no más de una línea; a cuatro, dos; a tres, dos; a dos, tres; y a una, cuatro”.
DOS PUNTOS
11.24. El signo de dos puntos (:) señala pausa precedida de un descenso en el tono; pero, a diferencia del punto, denota que no se termina con ello la enumeración del pensamiento completo. Se usa en los siguientes casos:
11.25. Ante una enumeración explicativa. Ejemplo: “Había tres personas: dos mujeres y un niño”.
11.26. Ante una cita textual. Ejemplo: “Luego, escribió en su diario: “12.35. El presidente Kennedy llega al Trade Mart”.
11.27. Ante la oración en la que se demuestra lo establecido en la que le precede (“pero no son los mismos, no pueden serlo: el 35ª presidente de estados Unidos ha sido asesinado”).
11.28. En los titulares, después del nombre de una persona, para indicar una frase, aunque no sea textual (“Stevenson: creo en el perdón de los pecados y en la redención de la ignorancia”). Pero no después del nombre de una ciudad (“Dallas: Kennedy ha sido asesinado”).
11.29. Después de dos puntos se escribe en minúscula, salvo que lo que lo que siga sea una cita (entrecomillada o no) o una enumeración en varios párrafos, cada uno de ellos precedido por un número o una letra en negra.
COMILLAS
11.30. Las comillas deben emplearse solo para encerrar frases reproducidas textualmente. Tienen también otros usos (enmarcar un sobrenombre, subrayar una palabra, destacar un neologismo o un término no castellano), pero para estos casos en el periódico se emplea la letra cursiva.
11.31. Se usan comillas inglesas o dobles (“”), así como las simples (``), pero nunca las francesas o angulares.
11.32. Cuando dentro de un entrecomillado vaya otro, el segundo se marcará con comillas simples. En caso de tener que escribir estos dos tipos de comillas juntos, por coincidir al principio o al final de la cita, se suprimirán las comillas simples.
11.33. Si el texto reproducido es tan extenso que comprende varios párrafos, se abrirán y cerrarán comillas en cada uno de ellos.
11.34. En el caso en que en medio de una cita textual se haga una apostilla o aclaración, las comillas han de cerrarse antes del inciso, que irá entre comas, y abrirse después de él.
11.35. La supresión de palabras o frases en un texto entrecomillado se marcará con puntos suspensivos. Si es al principio de la cita, los puntos suspensivos irán inmediatamente después de las comillas. Pero separados de la palabra que sigue por un blanco; si es en el medio, los puntos suspensivos irán entre paréntesis.
11.36. Las comillas – como sucede con los paréntesis y las rayas – van siempre antes del punto final, tanto si se abrieron una vez iniciada la frase como si se abrieron inmediatamente después del punto anterior.
11.37. En los titulares y en los ladillos compuestos en línea aparte se escribirán entre comillas entre comillas simples aquellas palabras que, en aplicación del libro de estilo, hubieran de ir en cursiva. En cambio, los ladillos engatillados, puesto que forman parte del texto (constituyen el inicio del párrafo), se compondrán en el tipo de cursiva que les corresponda. La regla es ésta: las comillas simples sustituyen a la cursiva en los textos que han de escribirse sin punto final.
11.38. Los términos no castellanos, los neologismos, así como los títulos de libros, películas, canciones, obras de teatro o musicales, o de lagunas de sus partes (capítulo de un libro, artículo de un diario), no se entrecomillarán. Como excepción, cuando se citen a la vez del título general de una obra y el de una de sus partes, este último llevará comillas simples.
11.39. Tampoco se entrecomillarán los nombres de animales, barcos, aviones y vehículos espaciales; los de programas, planes y operaciones: los de yacimientos, edificios, fincas y urbanizaciones; los de organismos, entidades comerciales y formaciones políticas; incluso las clandestinas, así como los nombres de agencias de noticias, calles, plazas, edificios, entidades, organismos y partidos escritos en un idioma distinto al castellano. Es decir, aquellos nombres en los que la mayúscula inicial evita la repetición de otros signos topográficamente diferenciadores, como la cursiva o las comillas.
11.40. Es una incorrección sintáctica emplear el que cuando se hace una cita en estilo directo. Para expresar las palabras tal como fueron dichas no se debe utilizar el que, y sí los dos puntos y las comillas. Ejemplo: “Felipe González dijo: “ya está bien de obsesiones golpistas”. En cambio, en estilo indirecto sobran estos dos signos ortográficos, ha de ponerse el que, y en ocasiones cambia la relación temporal de los verbos. Ejemplo:” Felipe González dijo que ya está bien de obsesiones golpistas”; “Felipe Gonzáles dijo que estaba cansado”.
PARENTESIS
11.41. Se emplea paréntesis ( ) para aislar una observación al margen del objeto principal del discurso, así como para incluir una llamada o un dato relacionado con ese discurso. Ejemplos: “la Gestapo (contracción de las palabras alemanas Geheime Staatspolizei)”; “la misma editorial ha publicado otra importante obra (*), cuya lectura se recomienda: “soy pesimista con la inteligencia, pero optimista por voluntad (Antonio Gramsci. Letrera dal carcere, página 115).
11.42. Paréntesis y rayas cumplen cometidos similares. Sin embargo, los primeros deben reservarse para los incisos acusadamente al margen del relato, y las segundas para aquellos otros que podrían ir entre comas, pero que las rayas refuerzan y diferencian con toda claridad. Ejemplos: “cuando Edgar Snow llegó por primera vez a China ( a los 22 años, con algún dinero ganado en Wall Street jugando a la bolsa), su propósito era quedarse seis meses, que se convirtieron en 13 años”; “ aquel que visita una tierra extranjera sin conocer el idioma – lo dice Francis Bacon – va como estudiante y no como viajero”.
11.43. Cuando en un inciso se abra otro, el primero irá entre paréntesis, y el segundo entre rayas. Ejemplos: “todos estos países isleños (las Filipinas, Indonesia, Sri Lanka – anteriormente Ceilán- y Mauricio) no forman propiamente un bloque”.
11.44. Los paréntesis – como sucede con las comillas y las rayas- van antes del punto final si es que se abrieron una vez iniciada la frase, y también cuando se abrieron inmediatamente después del punto anterior.
11.45. Nunca se utilizarán paréntesis en un titular, salvo en estos dos casos:
-para dar el resultado de una competición deportiva. Ejemplo: “BARCELONA GANÓ AL Madrid (95-92)”.
- Para localizar una población, pero sólo cuando se trate de un lugar completamente desconocido. Ejemplo:”500 muertos por inundaciones en Anqing (China)”.
11.46. En la firma no caben aclaraciones de este tipo, puesto que han de hacerse en el texto. Como excepción, se añadirá entre paréntesis, una denominación geográfica o política más conocida cuando se trate de nombres de ciudades repetidos, y aun así sólo en el menos próximo. Ejemplos: “Efe, Granada (Antillas)”; “Efe, Venezuela”; en el caso italiano, pero “Efe, Venecia (Columbia)”.
11.47. El cambio de tamaño o tipo de las letras hace innecesario el uso de paréntesis en frases que deberían llevarlos. Así ocurre con los pases de página o con las notas al pie, entre otros casos.
RAYA
11.48. La raya es un asigno ortográfico (-) cuya largura de trazo impide confundirlo topográficamente con el guión (-) o con el signo “menos” (-).
11.49. La raya sirve para aislar una observación al margen del objeto principal del discurso, como los paréntesis (ya se ha explicado, al hablar de éstos, cuándo deben emplearse rayas y cuando paréntesis).
11.50. El hecho de que coincidan al final de una frase la raya y el punto no es motivo para que se suprima ésta; en igualdad de circunstancias, tampoco desaparecen, por ejemplo, el paréntesis o las comillas.
11.51. En la transcripción de un diálogo, la raya marca el comienzo de las frases pronunciadas por cada uno de los interlocutores. En este caso, la raya ha de ir pegada a la letra inicial, sin blanco de separación alguno. No se volverá a situar raya antes del punto y aparte cuando la raya inicial haya abierto una frase de diálogo.
11.52. La raya puede utilizarse igualmente como elemento tipográfico, para diferenciar los apartados de una relación dividida en varios párrafos. En tal caso, la raya irá separada de la primera letra por un cuarto de cuadratín.
CORCHETES
11.53. En el periódico los corchetes ([]) se emplearán en los siguientes casos:
- para encerrar datos no recogidos por un corresponsal o enviado especial y que atañen a una crónica.
- Para añadir a un texto una o varias palabras que no figuran en el original, pero que facilitan su comprensión.
11.54. El punto y aparte va siempre detrás del corchete de cierre, y no dentro.
GUION
11.55. El guión (-) signo ortográfico de trazo más corto que la raya (--) y que el de menos se usa como elemento de unión.
11.56. En primer lugar, para unir dos adjetivos cuando éstos, cada uno por separado, siguen conservando su identidad. Ejemplo: “acuerdo greco-chipriota”: esto es, entre los Gobiernos de Grecia y Chipre. En cambio, no se empleará guión, y los adjetivos se escribirán sin blanco de separación, cuando, juntos, supongan una nueva identidad. Ejemplo: “comunidad grecochipriota”; osea la compuesta por los chipriotas de origen griego.
11.57. En los nombres de aviones, naves espaciales o cohetes, así como en los acontecimientos deportivos, festivales, exposiciones, entidades, marcas o modelos, no se empleará guión cuando al nombre le siga un número. Ejemplos: “Boeing 747”, “mundial 82”, “Radio 92”, sí debe usarse, en cambio, cuando se trate simplemente de iniciales o de siglas, siempre que estas no se hayan convertido en palabra común. Ejemplos: “ DC 10”, Tel Aviv”.
11.58. No se deben unir con guión los nombres de personas (salvo los chinos a los que no se aplique la transcripción pinyin) o de ciudades compuestas por dos o más palabras. Ejemplos: “Tel Aviv”
11.59. En las palabras unidas por un guión, la letra inicial de la segunda irá en minúscula. Ejemplo: “ETA Político-militar” Pero no en el caso de nombres propios o nombres de entidades o marcas comerciales. Ejemplo: “Land - Rover””
11.60 No se empleará guión entre la partícula ex y otra palabra cuando aquella se utiliza para decir que una persona ya no tiene el cargo o la condición que indica el nombre o adjetivo de persona al que se antepone. Ejercicios: “ex ministro”, ex discípulo” o “ex suarista”.
BARRA
11.61. Debe evitarse el empleo de la barra (/), sobre todo por lo que tiene de contradictoria su doble participación: una vez para unir, como para separar, como en los quebrados (1/2)
Salvo en artículos de colaboradores, en el periódico la barra sólo se usará en estos cuatro casos:
-para expresar el número y, en abreviaturas, el año de textos legales. Ejemplo:
- para las cifras que acompañan a los nombres de algunos modelos industriales“ordenador PDF 11/34”
- como elemento separador en la numeración de los seriales publicados en el periódico.
- Para distinguir los distintos versos en poesías o letras de canciones.
-para separar la firma de dos redactores de un mismo texto (circunstancia que se permite solo excepcionalmente).
11.62. En los dos primeros supuestos, la barra se escribirá sin espaciamientos adicionales; en los restantes, con blancos de separación a ambos lados. (De estos dos blancos, el situado a la izquierda de la barra ha de ser el signo de cuarto de cuadratín; así, en caso de partición a final de línea, la barra no pasará sola al renglón siguiente).
INTERROGACIÓN Y EXCLAMACIÓN.
11.63. Los signos de interrogación, uno para abrirla y otro para cerrarla (¿?), engloban el objeto de la pregunta, el cual puede ser toda una oración o sólo parte de ella. Los de exclamación (¡!), con los que se expresa fuerza o vehemencia, se utilizan en las mismas condiciones y con las mismas reglas que los de interrogación.
11.64. La inclusión de los signos de apertura no implica que la palabra que le sigue, escrita junto al signo, haya de llevar mayúscula inicial por este hecho. La llevará o no la llevará de acuerdo con las normas generales sobre el empleo de mayúsculas. (“¿vendrás hoy?”); “mi pregunta es esta: ¿vendrás hoy?; “sí te lo digo, ¿vendrás hoy?”).
11.65. Detrás de los signos de cierre nunca se pone punto, pero sí coma o punto y coma. Ahora bien, si al signo de interrogación o de exclamación le sigue un paréntesis, una raya o unas comillas, la frase ha de concluir con punto.
11.66. Un signo de interrogación encerrado entre paréntesis, en este caso siempre el de cierre, indica duda; el de exclamación, asombro. Sin embargo, ninguna de estas dos formas debe usarse en textos informativos.
11.67. Cuando una frase sea exclamativa e interrogativa al mismo tiempo no se duplicarán los correspondientes signos, sino que se abrirá con el exclamativo y se cerrará con el interrogativo.
APÓSTROFO
11.68. El apóstrofo es un signo ortográfico (*) con el que se indica en otras lenguas, entre otros supuestos, la elisión de una vocal a final de palabra cuando la siguiente comienza con una letra de igual clase. Ejemplos: “Sant Sadurni d’Anona”, “I’nvasione”,”I’obscurite”.
Y, en el caso concreto del inglés, también para el llamado genitivo sajón. Ejemplo: “América’s Cup”.
11.69. Se emplea mal en el castellano cuando se utiliza, como si se tratara de un genitivo sajón, en las fechas. Así, en el periódico se escribirá “Mundial 82’”, y no “Mundial ‘82”; “Ar3 83” y no “Arte ‘83”; aun cuando ésta sea la forma en que lo hagan sus organizadores.
11.70. No debe confundirse el apóstrofo, signo ortográfico, con el apóstrofe, figura retórica.
11.71. El apóstrofo que forma parte de dos letras árabes—la ayn y la hamza—no se transcribe.
PUNTOS SUSPENSIVOS
11.72. Los puntos suspensivos constituyen un solo signo ortográfico, formado por tres puntos y no más (…). Sirven para denotar que queda incompleto el sentido de una oración o cláusula de sentido cabal, para indicar temor o duda, o lo inesperado y extraño de lo que se cuenta a continuación: usos todos ellos que desaconsejan su empleo en textos noticiosos y, desde luego, como remate de una información.
11.73. Si se utilizan, hay que tener en cuenta que no pueden emplearse después de la palabra etcétera (que tampoco debe usarse en textos informativos) y que, al final de una frase, hacen innecesaria la inclusión del punto final.
11.74. Los puntos suspensivos se emplean también para indicar la supresión de palabras o frases dentro de una cita entrecomillada. En tales supuestos, cuando el corte se haya hecho al principio, los puntos suspensivos han de ir inmediatamente después de las comillas de apertura y separados de la primera palabra de la cita. Pero entre paréntesis y con blancos de separación a ambos lados, cuando el corte se haya producido en medio.
ASTERISCO
11.75. El asterisco (*) se emplea en el periódico para remitir al lector a una nota al final del texto. Se escribe entre paréntesis tras la palabra a la que se refiere, pero no sin blanco de separación. Ejemplo: ‘según dicho autor (*)’, y no ‘según dicho autor*’.
11.76. Cuando las citas sean más de una no se emplearán asteriscos, sino números, también entre paréntesis. Ejemplos: ‘en la citada obra (2)’, pero no ‘en la citada obra**’.
11.77. En caso de que la palabra haya de ir seguida de un signo de puntuación, el asterisco o los números se escribirán delante del signo de puntuación. Ejemplo: “otros autores como fulano (3), Mengano (4) y Zutano (5), no opinan así”.
ACENTOS
11.78. Las palabras cuyo acento prosódico carga en la última sílaba –las agudas- se acentúan ortográficamente cuando tengan más de una sílaba y solo cuando ésta termine en vocal. Ejemplos: “Alá”, “café”, “alhelí”, “huyó”, “Perú”. La y final, aunque suena como semivocal, se considera como consonante para los efectos de la acentuación.
11.79. Llevan igualmente acento ortográfico las palabras agudas que acaban en las consonantes n o s solas; es decir, no agrupadas con otra consonante. Ejemplos: “alacrán”, “también”, “albalcín”, “patatús”; pero “Orleans”, Isern”.
11.80. Las voces llanas – esto es, aquellas con acento prosódico en la penúltima sílaba- se acentúan únicamente cuando terminan en consonante que no sea no s, salvo que la n o la s vayan agrupadas con otra consonante. Ejemplos: “alcázar”, “alférez”, “Isbor”, “Ordóñez”, “Túnez”, pero “fórceps”,” bíceps”.
11.82 A estas reglas generales caben cuatro clases de excepciones: las que se derivan del encuentro de las vocales intermedias y extremas (diptongos y triptongos); las que permiten distinguir en una frase vocablos de igual forma, pero de distinta función gramatical; las provocadas por la formación de voces compuestas, y las que se aplican en el caso de nombres no castellanos o no castellanizados.
11.83. A los efectos ortográficos, no hay diptongo sino cuando las vocales extremas o débiles (i, u), se juntan entre sí o con cualquiera de las de articulación intermedia, o fuertes(a, e, o). Ejemplos: “viuda”,”ruido”, “jaula”,”Juana”, “cielo”, “fuego”,”odio”.
11.84. Para que haya triptongo se han de unir dos vocales extremas a una intermedia. Ejemplos: “buey”,”amortiguáis”,”despreciéis”.
11.85. La h muda colocada entre dos vocales no impide que estas formen diptongo. En consecuencia. En consecuencia, cuando alguna de dichas vocales, por virtud de la regla general, haya de ir acentuada, se pondrá el acento ortográfico como si no existiese la h. Ejemplos: “habido, “búho”, “rehúso”,”prohíben”,”ahíto”.
11.86. Cuando una vocal débil tónica va delante o detrás de una vocal fuerte átona no hay diptongo, sino hiato, y la vocal tónica llevará acento ortográfico. Ejemplos: en voces agudas, “país”,”raíz”,”Saúl”; en palabras llanas, “desvarío”,”falúa”,”sitúa”,”continúa”,”dúo”,”pía”,“día”,“mía”,”pío”,”acentúo”,”considerarías”,”desvaríos”,”insinúan”, “tenían”.
11.87. Los vocablos agudos terminados en ay, ey, oy, uy se escribirán sin tilde. Ejemplos: “Uruguay”,”virrey”,” convoy”.
11.88. Las palabras que terminan en una vocal tónica seguida de un diptongo y s final, lo cual ocurre en ciertas personas verbales, llevarán acento ortográfico en dicha vocal débil. Ejemplos: “comprendíais”, “decíais”.
11.89. Siguen la regla general de no acentuarse los vocablos llanos que finalizan en diptongo o en dos vocales fuertes, vayan o no seguidas de n o s final. Ejemplos: “seria”, “delirio”,”agua”,”fatua”,”bacalao”,”deseo”,“canoa”,“Feijoo”,”provee”,”albricias”, leyereis”,”corroen”.
11.90. Cuando una vocal fuerte tónica va delante o detrás de vocal débil átona forman siempre diptongo, y la acentuación gráfica de éste, cuando sea necesaria, irá sobre la vocal intermedia, o sobre la segunda si las dos son extremas. Ejemplos: “buscapié”,”averiguó”,”parabién”,”veréis”,”después”,”Sebastián”,”Guéjar”,”huésped”,”murciélago”,”muérdago”,”Cáucaso”.
11.91. La combinación ui se considera, para la práctica de la escritura, como diptongo en todos los casos. Solo llevará acento cuando lo pida el apartado anterior: y el acento se marcará en la segunda vocal; es decir, en la i. Ejemplos: “casuístico”,” cuídese”,”construí”, “atribuí”. Sin embargo, “casuistica”, “construido”, “destruido”, voces llanas se escribirán sin tilde.
11.92. Los infinitivos en uir se escribirán sin acento. Ejemplos: “construir”,” derruir”,”huir”.
11.93. Las formas verbales “fue”,”dio”, “vio” se escribirán sin tilde, según la regla general de los monosílabos.
11.94. La partícula aun llevará tilde (aún) y se pronunciará como bisílaba cuando, sin alterar el sentido de la frase, pueda sustituirse por todavía. Ejemplos: “aún está enfermo”,”está enfermo aún”. En los demás casos, es decir, con el significado de hasta, también, inclusive (o siquiera, con negación), se escribirá sin tilde. Ejemplos: “aun los sordos han de oirme”,”no hizo nada por él ni aun lo intentó”.
11.95. El triptongo se acentúa en la vocal fuerte. Ejemplos: “despreciáis”,”apreciéis”, “amortiguáis”,”averigüéis”.
11.96. Los monosílabos nunca llevarán acento, pues no pueden acentuarse sino en la única sílaba que tienen. No obstante, se escribe el acento cuando existen dos monosílabos iguales en su forma, pero con distinta función gramatical, en una de las cuales lleva acento fonético y en otra es átono. Ejemplos: “el”, artículo, y “él”, pronombre; “mi”,”tu”, pronombres posesivos, y “mí”,”tú”, pronombres personales; “mas”, conjunción adversativa, y “más”, adverbio de comparación; “si”, conjunción condicional, y “sí”, pronombre y adverbio de afirmación; “de”, preposición, y “dé”, tiempo del verbo dar; “se”, pronombre átono, y “sé”, persona de los verbos ser y saber.
11.97. La conjunción disyuntiva o no llevará acento, puesto que, al existir dos signos claramente diferentes, no se dan las circunstancias por las cuales la Academia Española hace preceptiva su acentuación: que esta letra pueda confundirse con el cero. Ejemplos: “3 o 4 personas”, “304 personas”.
11.98. La palabra sólo, en función adverbial, llevará acento ortográfico siempre, y no solamente cuando se trate de evitar una anfibología. Ejemplos: “le encontrarás solo en casa” (en soledad, sin compañía), “le encontrarás sólo en casa” (solamente, únicamente).
11.99. Los pronombres “éste”, “ése”, “aquél”, con sus femeninos y plurales, llevarán tilde, aunque la Academia Española considere lícito prescindir de ella cuando no exista riesgo de anfibología.
11.100. Los relativos “que”,”cual”,”quien”,”cuyo”, y los adverbios “cuando”,”cuan”,”cuanto”,”como” y “donde” llevarán tilde en las oraciones interrogativas y exclamativas. Ejemplos: “¿qué quieres?”,” ¿quiénes son estos señores?”,”pregúntale cuánto vale”,”dime cuándo volverás”,” ¡qué bien lo mereces!”, “¡cuán apacible se deslizan las horas!”,” ¡cuánto le ama!”, “¡cómo se alegraron todos!”, “¿dónde vive usted?”. Pero “¿qué estás dispuesto a hacerlo?”, “¡cuándo llegue, dices!”.
11.101. Los tiempos de verbo que llevan acento ortográfico lo conservan aun cuando acrecienten su terminación tomando un enclítico. Ejemplos: “pidióme”,”conmovíla”,”rogóles”,”convenciólos”,”andárase”,”déle”.
11.102. Cuando un vocablo simple entre a formar parte de un compuesto como primer elemento de4l mismo, se escribirá sin el acento ortográfico que como simple le habría correspondido. Ejemplos:”decimoséptimo”,”asimismo”,”rioplatense”,”píamadre”.
Se exceptúan de esta regla los adverbios en mente, porque en ellos se dan en realidad dos acentos fonéticos: uno en el adjetivo y otro en el nombre mente. Así pues, el adverbio se escribirá marcando en el adjetivo el acento que debiera llevar como simple. Ejemplos:”ágilmente,”cortésmente”,”lícitamente”.
11.103. Los compuestos de verbo con enclítico más complemento se escribirán sin el acento que solía ponerse en el verbo. Ejemplos: “sabelotodo”,”curalotodo”,”metomentodo”, igual que “correveidile”.
11.104. En los compuestos de dos o más adjetivos unidos con guión, cada elemento conservará su acentuación ortográfica, si le correspondiere. Ejemplos:”hispano-belga”,”anglo-soviético”,”cántabro-astur”, histórico-crítico-bibliográfico”.
11.105. Aunque no se trate propiamente de un acento, sí conviene recordar que cuando la g forma sílaba con los diptongos ue y ui, la sonoridad de la u se indica con el signo de diéresis. Ejemplos:” vergüenza”,”antigüedad”,”argüir”, pingüino”.
11.106. Los términos latinos se acentuarán de acuerdo con las leyes fonéticas para las voces castellanas. Excepto cuando formen parte de un nombre científico. Ejemplos: “trán-seat”,”exequátur”.
11.107. Si se emplea una palabra no castellana, ésta habrá de acentuarse de acuerdo con las normas del idioma a que corresponda. Ejemplos:”orfeó”,”unitá”,”prét-á-porter”,”Düsseldorf”. Se sobreentiende que utilizando para ello el tipo de acento apropiado: agudo (á), grave (á), circunflejo (á), la tilde del portugués (â) o la crema utilizada en español en casos de diéresis (ä).
11.108. Los nombres propios extranjeros se escribirán en general, sin ponerles ningún acento que no tengan en el idioma a que pertenecen. Ejemplos:”Wagner”, y no “Wágner”; Schubert”, y no “Schúbert”; “Windsor”, y no “Wíndsor”. Así se hará incluso cuando se trate de nombres de pila con idéntica grafía a la castellana. Ejemplos: “ Darío Fo”,”Oscar Wilde”,”Simón Wiesenthal”,”Víctor mature”,”Johan Sebastián Bach”,”Martin Luther King”,”Benjamin Franklin”. Si se acentuarán los nombres transcritos de los alfabetos ruso, hebreo, árabe y griego, por tratarse de una transcripción fonética. Ejemplo: Simón Peres.
11.109. Las anteriores reglas no son aplicables, en cambio, a los nombres que, por proceder de idiomas escritos en caracteres distintos a los romanos, han sido transcritos fonéticamente al castellano. En este caso, se acentuarán con arreglo a su pronunciación en la lengua original. Ejemplos:”Antón Chéjov”,”León Trotski”; “Pésaj, fiesta judía”; “el ayatolá”,”los fedayín”.
11.110. Los nombres geográficos ya incorporados al castellano o adaptados a su fonética no se han de considerar extranjeros y habrán de acentuarse gráficamente de conformidad con las leyes generales. Ejemplos:”Berlín”,”Munich”,”Zúrich”,”París”,”Lyón”,”Nuremberg”,”Seúl”,”Turín”.
11.111. Los nombres vascos terminados en ain, sean de personas o lugares, se pronuncian cargando el acento prosódico en la a: por tanto, la transcripción castellana de tales nombres llevará acento ortográfico en la a, no en la i. Ejemplos: “Andoáin”, y no “Andoaín”.
11.112. Los nombres y apellidos en las otras lenguas habladas en España se acentuarán según las normas ortográficas de ese idioma, y no las castellanas. Ahora bien, si en el nombre se utiliza la grafía castellana y la otra en el apellido, cada uno de ellos se acentuará con las normas que le corresponden. Ejemplos:”Joseph María Pujada”, pero “José María Climent”.
Distinto es cuando un determinado nombre tiene la misma grafía en castellano y en el otro idioma. En tales supuestos, se respetará la versión que utilice su titular, si es que se conoce (por ejemplo, “maría Aurélia Campmany”); cuando no sea así, se empleará la castellana.
11.113. Como licencia gráfica, la cabecera del periódico y las de sus suplementos no llevarán acento ortográfico cuando vayan compuestas en el tipo de letra utilizado por la marca registrada – la Claredon Médium-, pero sí en los demás casos.
MAYÚSCULAS Y MINÚSCULAS
11.114. Hay que evitar la proliferación o utilización innecesaria de las letras mayúsculas. Como norma general, se emplea mayúscula inicial en los nombres completos de entidades u organismos, salvo cuando éstos se mencionen con un genérico. Ejemplos: “Ministerio de Hacienda”; pero “el citado ministerio”; “Partido Comunista de España”, pero “el partido comunista”,” la Organización de las Naciones Unidas”, pero “la organización mundial creada en la conferencia de San Francisco”; “la dirección general ha señalado”, pero “la Dirección General de Tributos ha señalado”.
En cambio, se emplea minúscula en los nombres de cargos, salvo que se trate de dignidades de carácter único, y aun en este caso siempre que no precedan al nombre de su titular. Ejemplo:”la Dirección General del Tesorero”, pero “el director general del Tesorero”; “el Papa”, pero el papa Juan Pablo II”;”el Rey”, pero “el rey Juan Carlos I”.
11.115. En todo caso, se escriben con mayúscula inicial nombres propios de:
- Personas.
- Animales (Babieca).
- Instituciones (“el Ejército”, pero “un ejército mal pertrechado”).
- Establecimientos y entidades comerciales, industriales o culturales (“El Corte Inglés”,”Progreso Gráfico”, la “Fundación March”, “Ateneo de Madrid”,”Real Cinema”, pero “el cine Palafox”).
- Organismos públicos, ramas o brazos de la estructura política de un país y armas, cuerpos o unidades militares (“Instituto Nacional de Industria”; “Dirección General de los Contencioso”;”la Administración de justicia”;”el arma de Artillería”; “la Flota” –toda ella- o la VI flota de Estados Unidos”, pero “una flota interaliada”).
-Partidos políticos (“Unión Cívica Radical”, pero “el partido radical argentino”).
- Fiestas religiosas, patrióticas o populares (“Pascua”,”el Dos de Mayo”,”la Feria de Abril”,”el Rocío”,”San Fermín”, pero “los sanfermines”).
-Regiones geográficas específicas o zonas con significación ideológica propia (“Oriente próximo”, Mare Nostrum”, “Tercer Mundo”, o los países del Golfo Pérsico”, pero “navega por el golfo pérsico”).
-Acontecimientos históricos, pero no las eras, épocas, estilos y nombres de una generación (“la Revolución Francesa”, “la II Guerra Mundial”, “el Mayo del 68”, “la Primavera de Praga”, pero “era atómica”, “el isabelino”,” el romanticismo”, o “la generación del 98”).
- Las fechas que, por constituir un nombre propio, se escriben con todas sus letras (“el Movimiento Veintiséis de Octubre “).
- Premios y condecoraciones (“Premio Novel de Literatura”, pero “Camilo José de Cela, premio Novel de Literatura”). En cambio, los genéricos “medalla de oro”, “medalla de honor” irán siempre en minúsculas.
- Atributos divinos y, en general, toda referencia a Dios (“el Redentor”,”el Mesías”).
- Edificios, residencias oficiales, fincas, campamentos y urbanizaciones (“Torrespaña”, “la Zarzuela”, “Villa Teresita”,”vive el Gasco”).
- Reuniones y documentos políticos, diplomáticos o religiosos (“Tratado de Ultrech”, “Conferencia sobre desarme”.
- Acontecimientos deportivos importantes (“Juegos Olímpicos de Invierno”).
-Textos legales cuando se escriban completos (“Real Decreto 125/1983”, pero “el citado real decreto”; “Ley Orgánica del Derecho a la Educación”, pero “se prepara una ley de bases”).
-Apodos: en este caso, sin que el artículo se contraiga delante de las preposiciones a y de (“Rafael de Gómez, El gallo”, pero “así toreaba El Gallo” y “la maestría de El Gallo”; Ángel Pérez, El Chato,”, pero “ha sido detenido ‘El Chato’ y “los compinches de El Chato”).
Los nombres y tratamientos o dignidades de personajes de ficción, así como los nombres de animales antropomorfos (“Don Quijote”, “el Capitán Trueno”, “el gato con Botas”, “Mickey Mouse”).
- Las disciplinas académicas y los establecimientos docentes, pero no las ciencias o la universidad como nombres genéricos (“Derecho penal I”,”la Facultad de Derecho”, “la escuela de Enfermeras”,”la Universidad de Granada”, pero “grandes progresos de la medicina”,”su hijo va a la universidad”).
-Los puntos cardinales (“el Norte”,”Levante”).Pero todo en minúsculas, salvo que figuren en un nombre propio, como parte de una zona, cuando indican dirección o empleados en forma adjetiva (“Yemen del Sur”,”el norte de España”,”al norte de España”, “España norte).
-Los artículos que formen parte de un apellido, siempre que no vayan precedidos del nombre, en cuyo caso se escribirán en minúsculas (“Del Valle”, pero “José del Valle”; “De Gaulle”, pero”Charles de Gaulle”; “Von Papen”, pero “Franz von Papen”; “El Barzani”, pero “Mustafá el Barzani”; “Dos Santos”, pero “Joaquín dos Santos”).
-Los nombres de lugares aplicados a cosas cuando se refieran a un número determinado de ellas, como si se tratase de un apellido o marca, y no a todas las de su especie, en cuyo caso constituyen un genérico (“un vino de Jerez”, pero “un jerez seco”; la producción de la Champaña” pero “una copa de champaña”).
11.116. En los títulos de libros, películas, obras de teatro y canciones sólo se escribirá con mayúscula la letra inicial –salvo que en ellos figure algún nombre propio--, cualesquiera que sean las normas al respecto del idioma en que estén escritos, Con una excepción; las cabeceras de publicaciones periódicas, que llevan mayúscula inicial en todas las palabras (“Newspapers: the power and the money” y no “Newspapers: The Power and the Money”, pero “Corriere della Sera”).
11.117. En las palabras unidas por un guión la letra inicial de la segunda irá en minúscula (“ETA político-militar”, “la ciudad castellonense de Vila-real”). Pero no en el caso de nombres de entidades o marcas comerciales (“Metro-Goldwyn-Mayer”, Rolls-Royce“, “Land-Rover”).
11.118. Igualmente se empleará mayúscula inicial cuando, después de dos puntos, se abra una cita o enumeración con varios párrafos, cada uno de ellos precedido por una raya o un número; en este caso compuesto en negrita.
Ello no significa que deba emplearse mayúscula en todas las citas. Por ejemplo no ha de escribirse, Los manifestantes gritaban “Abajo el Gobierno” y “Presidente, dimisión”.
11.119. Las firmas de informaciones, artículos, fotografías, gráficos o ilustraciones se escriben todo en mayúsculas.
11.120. Las palabras con mayúscula inicial o to en mayúscula llevarán el acento ortográfico que les corresponda.
11.121. Por el contrario, en los siguientes casos se escribirá todo en minúsculas:
-En las denominaciones de cargos, los tratamientos y las expresiones de un idioma distinto al castellano, cualesquiera que sean las normas al respecto de esa lengua (“premier”, pero no “Herr”; “ancien régime”, pero no “Ostpolotik”).
-En las palabras que designan accidentes geográficos, edificios, locales públicos y vías urbanas, pues no forman parte del nombre propio, Ejemplos; “mar Egeo”, “palacio de Santa Cruz”, “cine Narváez”, “avenida de Valladolid”. En cambio, se emplea mayúsculas con los equivalentes no castellanos de estas mismas palabras –pero nada más que cuando preceden a un nombre propio- , a fin de evitar el uso de la cursiva en parte de la denominación. Ejemplos:” Rue de Rivoli”, pero no “rue de Rivoli”;”Palazzo Chigi”, pero no “palazzo Chigi”; “Buckingham Palace”, pero no “Buckingham palace”.
- En las siglas y acrónimos convertidos por el uso en palabra común, pero no en nombre propio. Ejemplos: “ ovni”y “koljós”, pero “Talgo” y “komíntern”.
- En los nombres de personas que derivan en nombres genéricos, escritos en cursiva (“Ruiz Miguel toreará seis victorinos”, “la colección consta de 30 picassos y dos tápies”).

viernes, 22 de enero de 2010